CIUDAD DE MEXCO.- Las investigaciones de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) contra Enrique Peña Nieto no sólo apuntan contra el expresidente de México, sino también contra personas más o menos cercanas, ya que le siguen los pasos a Adriana Rivera Hurtado, excuñada del priista y hermana de la actriz Angélica Rivera.
De acuerdo con Latinus, Adriana Rivera está “en la mira” de la UIF debido a sus nexos con la empresa Actidea, la cual es investigada por la autoridad por recibir 141 contratos, por un total de 833 millones de pesos, durante el sexenio de su entonces cuñado, Enrique Peña.
La mayoría de ellos, alrededor del 90 por ciento, se dieron por adjudicación directa.
El portal de noticias revela que la firma dedicada a la organización de eventos obtuvo contratos por parte de al menos 37 instituciones, entre ellas la Oficina de la Presidencia y el DIF, donde la ex Primera Dama Angélica Rivera se desempeñó como presidenta del Consejo Ciudadano Consultivo.
“No había transcurrido ni un año del gobierno de Peña Nieto cuando la Presidencia de a República le adjudicó directamente, sin concurso, uno de los contratos más jugosos de 2013, la organización del Grito de Independencia, el cual costó 17.4 millones de pesos”, explica la investigación de Latinus en un video de YouTube.
Según el medio Latinus, la empresa Actidea es propiedad de Eduardo Gama y Alfredo Gatica, yerno del expresidente Carlos Salinas de Gortari.
Con información de Latinus