Por JOSÉ UREÑA
La degradación como país no tiene límites.
Una decisión presidencial nos precipita al tobogán.
Andrés Manuel López Obrador difundió el número telefónico de la corresponsal de The New York Times en México, Natalie Kritoeff, y vino la polémica.
Y luego la venganza.
Comenzaron con el hijo mayor del tabasqueño, José Ramón López Beltrán, quien de inmediato acusó el golpe en sus cuentas sociales de la filtración.
Entre otras cosas escribió:
“¿Por qué buscan vengarse exponiendo mi teléfono? ¿Qué tengo que ver yo con todo esto?
“No cesan de exponer mi privacidad. Nos han acosado en todos los lugares en donde he vivido con mi familia, utilizando drones, cámaras, ‘políticos’ y ‘periodistas’, revelando la ubicación de todas ellas.
“Incluso han enviado extraños a mi casa con la intención de intimidar…”.
A López Beltrán siguieron Claudia Sheinbaum, Mario Delgado, Citlalli Hernández y otros cuadros del gobierno y cercanos a López Obrador.
EL DEPORTE NACIONAL
El fin de semana fue el deporte nacional.
La persecución alcanzó a Xóchitl Gálvez quien, a diferencia de los demás políticos, dio un golpe de altura al decidir preservar el número y compartirlo con la sociedad.
Enjuició:
“Como resultado del pésimo ejemplo que dio el presidente López Obrador, se publicaron con mala leche muchos más teléfonos.
“Filtraron también mi número y desde entonces no han dejado de llegar mensajes.
”Si aún no lo tienes, aquí se los dejo: 55 2899-1235.
“He decidido no cambiarlo. Entre los mensajes que he recibido critican mis kilos demás y me critican los dientes chuecos. No se preocupen: eso se quita…”.
Y aludió al cariño y mensajes de solidaridad y apoyo de la población.
Es real: el número de Xóchitl lo tengo desde hace más de diez años y con él nos enlazamos para cenar cuando, en 2015, el Tribunal Electoral por decisión unánime la hizo jefa delegacional de Miguel Hidalgo.
Recibimos la noticia ella, su hija, su yerno y yo de madrugada en un restaurante.
Xóchitl no se oculta porque acaso nada tiene qué ocultar.
LA PRUEBA DE ACAPULCO
1.- Hoy comienza el Abierto de Acapulco, acaso el mayor evento deportivo del año en el puerto guerrerense porque atrae la mirada internacional.
Hay cuatro estrellas confirmadas: Alexander Zverev, Holger Rune, Taylos Fritz y Stefanos Tsitsipas, pero la expectación estará en el ganador de Los Cabos, el tozudo Jordan Thompson.
La atención mundial estará en tres aspectos: la infraestructura hotelera, el transporte y la conectividad pública a los cuales se ha volcado el gobierno de Evelyn Salgado.
Muchos dudaban de esta recuperación; Evelyn pretende demostrar la disponibilidad plena de servicios para las semanas Santa y de Pascua y luego para las vacaciones de verano 2024.
Y 2.- ya le salió un émulo a Samuel García.
El regiomontano no quiso dejar la gubernatura de Nuevo León y Cuauhtémoc Blanco tampoco quiere retirarse de Morelos.
Necesita el fuero para no ir ante la justicia por malos manejos administrativos y procesos penales abiertos por el fiscal Uriel Carmona.
Pero si no se va no podrá ser candidato a diputado federal, donde sí tendrá protección por lo menos durante tres años.
