CIUDAD DE MÉXICO.- Para el jefe del control político del Senado de la República, Ricardo Monreal Avila, el incumplimiento político del Gobierno federal al PRI con los acuerdos de la última reforma en materia de seguridad fue lo que mató la reforma electoral.
No fue la marcha por la democracia y en defensa del Instituto Nacional Electoral (INE) por lo que el Presidente de la República anunció un plan B, más bien no hay forma de que la mayoría calificada se construya en la Cámara de Diputados, dado el anuncio del dirigente nacional del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas.
“El presidente del PRI siente que no se ha cumplido con los acuerdos de la última reforma en materia de seguridad y la agresión sobre todo del estado de su origen sigue persistente, y eso aleja la posibilidad de acuerdos; por eso no creo que el PRI acompañe la reforma y, sin el PRI, no se lograría la mayoría constitucional”, indicó Monreal Ávila.
En entrevista, el coordinador de la mayoría legislativa consideró que el PRI ya tenía la decisión tomada, pues Alito sintió que no se habían cumplido los acuerdos, fundamentalmente los ataques que a diario recibía.
“Y creo que en la política los acuerdos son claves; si no se honra la palabra, los partidos se alejan, y tienen razón. Si un dirigente, un funcionario o un Poder que se compromete con una situación y no se cumple, el otro no está obligado a cumplir”, acotó el senador de Morena.
En la lógica parlamentaria, Ricardo Monreal razonó que obliga a pensar que no se reunirá la mayoría calificada y, por tanto, el Presidente de la República o los legisladores de la mayoría están pensando en un plan B, similar a la reforma eléctrica. Por ello, podría modificarse la Ley de Medios de Impugnación o la Ley Electoral, que no requiere mayoría calificada.
Con información de Quadratin
