MORELIA, Mich., 29 de febrero de 2024.- En Cotija la gente ya aprendió a autoprotegerse y cambió su forma de convivir, ante la incertidumbre y desconfianza que generan los grupos criminales, reconoció el presidente municipal provisional Alberto Contreras Mendoza.
A las nueve o 10 de la noche la plaza ya está sola, la gente que vende comida ya cerró y todo mundo se va a su casa a resguardarse lo más que puede porque los pobladores tienen claro que viven en una zona de conflicto, por estar en los límites con Jalisco, señaló el edil.
“Es como una Franja de Gaza”, comparó, quien fue presidente municipal en el trienio 2012 a 2015, y ya le tocaron algunos eventos criminales, pero en aquel tiempo solo había presencia de un grupo y ahora son dos que se disputan el territorio y los ciudadanos no tienen nada para contrarrestarlos.
“Se vive con temor, no hay confianza, siempre hay incertidumbre, no porque uno ande en cosas malas sino porque te toque una circunstancia de conflicto entre los grupos, pero como que también uno se habitúa a la nueva situación… hay que sortearle, no puede uno decir nada, es entre ellos, que se pongan de acuerdo y nos dejen trabajar”, reconoció.
A fin de cuentas, dijo como en todo pueblo chico, la gente se conoce y desde que las camionetas que manejan la gente distingue que son de “aquellos” y los evita, porque nadie quiere tener problemas, como ocurre en todo el estado y en todo el país.
Contreras Mendoza consideró que actualmente el municipio está relativamente tranquilo porque hay presencia militar y de la Guardia Nacional, aunque a veces hay eventos en los que los ciudadanos se ven envueltos circunstancialmente.
