MORELIA, Mich.- Es 15 de septiembre y el recuerdo del hecho trágico de 2008 surge con más fuerza en la memoria de quienes vivieron la tragedia ocasionada por granadas de fragmentación en la celebración del Grito de Independencia.
En pleno corazón de Morelia los artefactos explosivos marcaron para siempre las vidas de las víctimas, directas e indirectas, pues sufrieron quienes resultaron con heridas, como su familia, que estuvo con ellos en el camino de la recuperación.
Paz Bravo, madre de una de las víctimas de este fatídico hecho, lamentó que la autoridad y funcionarios solo se acuerden de ellos cuando se acerca esta fecha, pero el resto del año permanecen casi en el olvido.
“Apenas otros compañeros están siendo reconocidos como víctimas y para que se logre el objetivo total es necesario que todos estemos reconocidos en esta situación”.
Con información de Quadratín CDMX
