SHEINBAUM-DELGADO-“ALITO”
Por Eleazar Flores
DE PENA AJENA-. Mientras la jefa de gobierno Claudia Sheinbaum capoteaba un día después con más propiedad a los gritos de “presidenta, presidenta”, Mario Delgado detectó la existencia de “fuego amigo” a los gritos de “fuera, fuera”.
Quien de plano da pena ajena es el presidente nacional del PRI Alejandro Moreno Cárdenas obligado a sesionar en Santa Fe con su comité, al carecer de valor para enfrentar y dialogar a su compañero de partido Ulises Ruíz.
MORENA-. Como si fuera necesario, los dirigentes y cuadros de lujo del Movimiento de Regeneración Nacional, MORENA, festejaron al puro estilo priista los tres años del triunfo de su “divisor del sureste” con acarreo multitudinario para llenar el Auditorio Nacional. A ver quién se atreve a pedirle al partido rendir cuentas.
Lo de “divisor del sureste” procede y es algo bien ganado por su actuar, pues recuerde que ya tenemos al “Centauro del Norte” en el general Francisco Villa y al Caudillo del Sur en el inmortal Emiliano Zapata.
Al día siguiente del festejo en el auditorio nacional, Claudia Sheinbaum aclaró en conferencia de prensa que estaba concentrada en cumplir con su responsabilidad en la ciudad de México y ni mutis hizo cuando le recordaron los gritos de “presidenta, presidenta” en el Auditorio Nacional un día antes.
Cara diferente, en dicho evento de nervios y al día siguiente hasta de enojo, del presidente nacional de MORENA Mario Delgado Carrillo, al recordar que buen número de los 10 mil asistentes, -cifra dada por él-, gritaron con la misma fuerza que a Claudia, pero este para decirle “fuera, fuera”.
En declaraciones periodísticas el colimense cincuentón aclaró que se trató de “fuego amigo” de personas interesadas en dividir, ¿cómo su jefe?.
PRI-. Si realmente se tratara solamente de dos cabezas visibles de la inconformidad contra su dirigente, realmente se ve muy verde el presidente tricolor Alejandro Moreno Cárdenas, obligado a convocar a sus apoyantes a sesionar en un hotel ubicado en la zona de Santa Fe.
Con este hecho su novatez reluce aun más, pues se supone tener mayor fuerza que su opositor oaxaqueño Ulises Ruíz Ortiz, quien por haber gobernado Oaxaca de 2004 a 2010, podría suponerse haber vivido sus mejores años pero por lo visto no es así.
Tanta incapacidad de diálogo del ex gobernador campechano “Alito” podría adjudicarse a su cuarentona edad pues los de la tienda en enfrente van de los cincuenta y más, así que pobres de los campechanos antes y de los priistas ahora.
Máxime con las peregrinas, -por decir lo menos-, declaraciones periodísticas en las que lejos de convocar a la unidad, remarca las diferencias con sus opositores internos, pobre ¿partidazo?
