SE RENOVARÁN CASI 20 MIL CARGOS DE ELECCIÓN
Por Eleazar Flores
EL INE BOZALIZADO-. En plenas PRECAMPAÑAS que de hecho son CAMPAÑAS, por preponderancia presidencial el Instituto Nacional Electoral ha sido domesticado, tanto que calla ante tantos abusos al marco jurídico, empezando por hechos de López Obrador en plena campaña cuatrotera.
Creerle que recibió en SU palacio a SU candidata Claudia y que no hablaron de política es calificar a la opinión pública de enanismo político y créame que el PUEBLO BUENO ya no se va con la finta.
Si, es reiterativo pero a los persistentes habría que recordarles una vez más que como presidente de todos los mexicanos, el hijo predilecto de Macuspana debería recibir en SU palacio a los demás candidatos Xochitl Gález y Samuel García, también para preguntarles ¿CÓMO VAN?, la misma interrogante que dice haberle planteado a Claudia Sheinbaum, ¿no cree?.
Con estas actitudes con sutil vocabulario también es incurrir en violaciones al marco jurídico electoral vigente, casualmente aprobado en su momento, entonces por legisladores perredistas que de amarillos se han pintado de guinda de cinco o tres años a la fecha.
Incluso la opinión presidencial favorable al gobernador-precandidato neolonés Samuel García, también es injerencia ilegal, tanto como ilegal el procedimiento del propio García Sepulveda, que no solo quiere irse sino IMPONER a su sucesor, facultad exclusiva de la Legislatura neolonesa.
CASI 20 MIL CARGOS-.Están en disputa la presidencia de la república, 128 senadurías, 500 diputaciones federales, mil 98 diputaciones locales, mil 803 cabildos que sumadas regidurías y sindicaturas en algunos casos, llegan casi a los 20 mil cargos, pero ante este reto el árbitro electoral se mantiene no inmóvil pero sí callado ante tantas faltas cometidas por candidatos de todos los partidos.
En este ambiente netamente electoral en todo el territorio nacional, ciertamente hay entidades en las que impera relativa calma mientras no aparezcan las propuestas para las candidaturas a las gubernaturas, senadurías, diputaciones federales y locales pero sobre todo para las presidencias municipales, los cargos más peleados, seguramente por más cercanos para participar.
Esto porque para elegir candidato-a a gobernador-a la ciudadanía está muy lejos de opinar, incluso para las senadurías y diputaciones, pues los partidos son los responsables de proponer a sus aspirantes a las candidaturas a dichos cargos.
Pero para las presidencias municipales la población literalmente obliga a los partidos a escuchar a la gente antes de tomar una decisión, y cuando no lo hacen casualmente el partido proponente pierde por negarse a escuchar.
Ante todo este panorama el INE debería ocupare de que los protagonistas observaran las leyes electorales en sus diversas etapas, pero hasta donde vamos ha sido omiso o lento, como los castigos del TEPJF al presidente, “solo” seis meses después.
