Este mediodía, en presencia de autoridades municipales y estatales, pobladores de comunidades del occidente de la demarcación, destruyeron una estación de monitoreo del clima de la empresa Folia, que pretende instalar en la zona miles de panales solares en una superficie de 800 hectáreas de tierra.
La firma, basa sus intenciones en que, supuestamente ya adquirió los derechos por las tierras, además de tener todos los permisos civiles para tal efecto; sin embargo, hasta el momento no ha mostrado documento alguno que avale sus dichos.
El comité vecinal que ha estado desde 2019 en contra del proyecto, denunció que la compañía ha estado se ha metido a trabajar a propiedad privada sin permiso.
Si bien reconocieron que, algunos ejidatarios sí vendieron o arrendaron sus tierras, dijeron que no todos firmaron un contrato y los que lo hicieron, fue con engaños, además de que la filial de la empresa española Ibeldrola ha incumplido con lo que le corresponde, por lo que los contratos son inválidos.
Para atender la problemática, arribó al lugar el director de Gobernación de la región Tula, Efraín Pedraza Cruz, quien, en este sentido, ofreció a las inconformes asesorías de la coordinación jurídica del gobierno del estado.
Uno de los labriegos que firmaron, identificado como Mario, aseguró que rubricó el documento porque le dijeron que se trataba de un proyecto que era amigable con el medio ambiente, cuando es todo lo contrario, además de que les iban a dar mil 100 dólares anuales por la tierra, y sólo han recibido cantidades entre 600 y 800 pesos.
El comisariado de la comunidad de Macuá, Álvaro Badillo y al subdelegado de la localidad, Rubén Martínez López, sostuvieron que la oposición a las celdas, se debe a que ya se ha demostrado en otros puntos cercanos, como Nopala de Villagrán, que, con su instalación, deja de llover, lo que implicaría una sequía sin precedentes, aparte de la que ya se está viviendo.
Además, agregaron que significaría la desecación de los mantos acuíferos, y la tala de al menos 10 mil árboles, principalmente mezquite y huizache -que se encuentran protegidos- manifestaron que éstos se encuentran plantados en la superficie a desmontar para disponer los paneles.
Asimismo, advirtieron que, si pasa el proyecto, la fauna endémica de la zona perecerá también.
“Estamos ante un ecocidio que no permitiremos, defenderemos lo poco que nos queda de calidad en el ambiente, si es preciso lo defenderemos con nuestras vidas”.
Llamaron a los tres niveles de gobierno a frenar el proyecto, porque de lo contrario habrá derramamiento de sangre.
Por otro lado, cuestionaron a Pedraza Cruz, sobre los permisos, a lo que el funcionario explicó que, de acuerdo a lo que ha investigado desde hace tres meses, Folia no cuenta con ninguna licencia.
Ante este comentario, los pobladores se preguntaron con qué derecho habían construido la estación de monitoreo del clima, y, en consecuencia, acudieron a destruirla.
Se tendrá una reunión de seguimiento del tema el próximo 29 de julio en la sala de Cabildo a las 9 de la mañana.
Con información de Quadratin
