NUEVO LAREDO, Tams.- No pudo avanzar el año nuevo con saldo blanco.
Las primeras grandes balaceras conocidas se dieron en Nuevo Laredo, Tamaulipas, donde en dos enfrentamientos murieron al menos cuatro personas y otras resultaron heridas.ç
Todo a plena luz del día.
El pánico fue generalizado y la población debió refugiarse en centros comerciales soy otros espacios cerrados que les ofrecieron protección ante las ráfagas.
La información es muy escueta, pues la población está aterrada y los medios informativos callan para no ser víctimas de las amenazas del crimen organizado.
Simplemente indica que los abatidos son miembros del Cártel del Noreste y que en los hechos participaron elementos de la Policía Estatal, aunque luego llegaron refuerzos federales.
Hay al menos dos choques registrados.
En el primero murieron tres sicarios, pero después hubo otro donde cayó otro y al menos un policía resulto herido.
No hay información oficial y, ante el vacío, algunas personas subieron imágenes sus redes sociales desde distintos ángulos donde se observan muertos y vehículos en fuga.
También se observa a la gente correr en busca de refugio mientras en la calle la metralla no paraba.
Según datos de esas tuiteros, el primer enfrentamiento se dio en la colonia Francisco Villa, al poniente de Nuevo Laredo, cuando hombres que viajaban en una Chevrolet Pick-up emboscaron a policías estatales.
Luego se dio una persecución por distintos sectores de la ciudad, por lo cual la alarma fue generalizada y la gente huyó despavorida hacia donde pudo guarecerse.
Al sentirse cercados, algunos delincuentes abandonaron las camionetas donde viajaban e ingresaron a viviendas: ahí fueron abatidos por las fuerzas estatales.
Llevaban armas largas, vestían ropa tipo militar e iban equipados con equipo táctico para ubicar a las policías y comunicarse entre ellos e interceptar llamadas de la seguridad pública.
El mayor terror lo sembró el segundo enfrentamiento porque se dio por distintos lugares de Nuevo Laredo y, espantados, los comerciantes cerraron. sus negocios y no dejaron entrar a la población asustada.
