CIUDAD DE MÉXICO.- Si los procesos electorales son trastocados por quienes temporalmente ocupan el poder, se corre el riesgo de que una persona crea y asuma que su proyecto de gobierno puede ser impuesto sin importar lo que opinan los ciudadanos, aseguró el ex ministro del la Suprema Corte de Justicia de la Nación, José Ramón Cossío, quien fungió como orador en el Zócalo durante las manifestaciones en defensa del INE.
Ante decenas o tal vez cientos de miles de ciudadanos que llenaron la plaza del Zócalo, el abogado constitucionalista dijo que desde finales del año pasado el Ejecutivo federal, por medio de sus mayorías parlamentarias, intenta apoderarse del sistema electoral modificando la Constitución.
Dijo que gracias a la anterior marcha del 13 noviembre pasado se impidió que el Gobierno y sus legisladores pudieran destruir el sistema electoral mexicanoo, sin embargo, la respuesta oficial fue lanzar un plan b lleno de “violaciones a los procesos legislativos y contenidos” por lo cual la defensa del ciudadana se tornará hacía los órganos judiciales.
“La política dejará de hablar y lo hará el derecho y los órganos de imputación de justicia, por conducto de las instituciones previstas en las mismas normas jurídicas que regulan la elección de los representantes populares, mediante los cuales se han aprobado la leyes que ahora pretenden imponer.
“Desconocer el papel de la justicia, tal y como prevé la Constitución, y argumentar la mera prevalencia de la política de un proyecto político, de un hombre que considera que su proyecto nos puede ser impuesto a todos, implica ponerse fuera del orden jurídico que sustenta el propio cargo que ahora ocupa”, aseguró Cossio.
Abundó que la Suprema Corte de Justicia ya conoce diversos juicios en los que se han impugnado las leyes que buscan apoderarse de los órganos electorales, y anticipó que con las nuevas leyes del plan b, una vez que se publiquen, darán pie a una serie de inconformidades que serán promovidas por instituciones y por ciudadanos por la vía judicial.
José Ramón Cossio aseveró que no existe una conspiración sino el ejercicio y uso de las facultades contenidas en la Constitución.
