MOCHILA (IN)SEGURA
Por Eleazar Flores
¿QUIÉN LO HARÍA?, A raíz del asesinato en contra de una maestra por parte de uno de sus alumnos, de inmediato surgieron de voces de “expertos” para enfrentar esos hechos, olvidando que la raíz de la violencia adolescente se origina en una mayor parte en la desatención paterna.
Concretamente, en la desintegración familiar producto de divorcios o separación de padres o cuando no se llega a esto, los pleitos verbales o hasta físicos suceden frente a los propios hijos.
OPERACIÓN MICHILA-. El o los intentos por llevar a cabo la “operación mochila” data de hace unos tres lustros o una década, en tiempos de los regímenes panistas, enfocando este procedimiento en las primarias y secundarias públicas del país. Se creyó que iniciando este esfuerzo, las escuelas privadas seguirían el ejemplo, pero nunca se anunció oficialmente ni en el país ni en los estados
Cabe advertir que en algunas entidades y de mutuo propio, esta operación mochila se llevó a cabo en forma por demás discreta pero a las primeras reclamaciones se paró todo. Para variar, fueron justamente los padres de familia los que protestaron, argumentando violar la privacidad a la que tienen derecho los niños y adolescentes.
Esto fue lo menos grave, el punto crítico es que en aquellos planteles donde se aceptara la revisión de mochilas tendría que haber colaboración de padres de familia y docentes en forma simultánea, dado que se perdía mucho tiempo. Se sugirió que los profesores llegaran media hora antes del horario oficial y los padres de familia también, justamente para no distraer el tiempo de estudio.
Este hecho, el de adelantar mínimo media hora los tiempos de trabajo es lo que objetó el magisterio, y de los padres de familia ni que decir, había y adolescentes que llegaban solos a sus escuelas por lo que no había familiar alguno que colaborara con la causa. Con los abuelos no se contaba siempre. Todos los imponderables anteriores desterraron la “operación mochila”.
Ahora resulta que el secretario de Educación Esteban Moctezuma lanza su “novedosa” campaña de revisión de mochilas. Para tener éxito y no fracasar como en otros proyectos, debería anunciarlo con carácter obligatorio, lo que requeriría la infaltable colaboración de los paterfamilias pues muchos de éstos no están tan pendientes como se quisiera, del andar académico de sus hijos.
Máxime que, no todos pero sí muchos de los escolapios de primaria y secundaria, se sienten intocables o sus papás los hacen sentirse así, teniendo en la Comisión Nacional de los Derechos Humanos su principal arma de defensa, para denunciar la mínima regla disciplinaria por lo que en ocasiones y para evitar enfrentamientos, se permiten hasta indisciplinas.
