RIOVERDE, SLP.- El grupo independiente de rescate y adopciones (GIRA), ha contabilizado más de 30 perros envenenados en diversos puntos de la ciudad de Rioverde en las últimas dos semanas.
El delito de maltrato animal, que lejos de tener castigo, deja una percepción de indiferencia por parte de la sindicatura municipal, obligado por ley a ofrecer acompañamiento en estos casos.
Entrevistadas en la plaza principal, las voluntarias Rosa María Torres y Mary Mancilla coincidieron en externar su preocupación y tristeza por las acciones de ciudadanos que asesinan perros de la forma más vil: darles alimento con veneno.
La organización contabilizó 25 perros muertos en el barrio de Los Ángeles, siete en puente del Carmen y recientemente uno en el centro de la ciudad de Rioverde.
Los miembros de GIRA afirman que hay un hartazgo y enojo de una parte de la sociedad que incluso espera tomar venganza por su propia cuenta, debido a la indolencia de las autoridades municipales.
A pesar de confirmar su petición de asesoría en sindicatura, el síndico primero Ulises Ledezma señaló no conocer el tema ni haberse presentado una denuncia al respecto.
Es decir, la visita de las voluntarias de nada sirvió, pues se topó con la clásica indiferencia, disfrazada de burocracia.
Ledezma Salazar dejó en claro que para establecer una denuncia, se debe aportar pruebas para iniciar con las diligencias necesarias, términos legales que terminan desalentando a los denunciantes.
El funcionario municipal aceptó que Rioverde como otros municipios no cuentan con la infraestructura para atender estos casos. Mientras tanto a los grupos de rescate, solo les queda seguir denunciándolo en redes sociales
