CIUDAD DE MÉXICO.- Los mexicanos, son personas encantadoras, amables, ayudan a los demás en condiciones trágicas, son educados, trabajadores y sobre todo, les gusta divertirse.
Pero en la crisis que el mundo entero vive al parecer les “vale” morir de COVID-19.
La mayoría se la vive en fiestas clandestinas pues argumentan “Ya estamos hartos del encierro”. Tal fue el caso que ocurrió en un antro clausurado en Palmas 810, en Las Lomas. La bodega del lugar fue utilizada para armar una fiesta clandestina, del lugar sacaron más de 70 personas, todas las personas que asistieron al lugar salieron sin cubrebocas, ni siquiera se veía que tenían alguna medida de protección en contra del COVID-19.
Hoy el diario 24 horas, da a conocer que en la Merced y anillo de Circunvalación hay multitudes de personas, esto debido a las compras de fin de año.
Esto quiere decir que los mexicanos prefieren tener una buen festejo de Navidad y año nuevo que cuidarse.
Cuando la pandemia inició en México los mexicanos culpaban al gobierno del mal control de la pandemia, ahora si analizamos de quien es la culpa… del gobierno o de los mexicanos que no respetamos las recomendaciones de las autoridades de salud para mantenernos a salvo.
Esta semana se dio a conocer que debido a aumento de hospitalizaciones , el Hospital General de México ” Dr. Eduardo Liceaga ” se encontraba en semáforo rojo, los casos de coronavirus registrados eran casi igual a los de mayo, donde estábamos en crisis.
El gobierno de la CDMX anunció que los negocios no esenciales del Centro Histórico y Colonias de Atención Prioritaria (CAP) deberán cerrar de lunes a sábado a las 17 horas y no abrirán un día a la semana.
El secretario de gobierno, José Suárez del Real hizo este anuncio luego de que se declarara a la Ciudad de México en estado de alerta y emergencia por el alto número de contagios por covid-19.
Con información de Carlos Jiménez, Proceso y 24 horas
