Los cuchillos largos en la noche sin paz
Por RAFAEL CARDONA
Noche de paz. Mentira anhelante, en todo caso, pero falsedad total, en toda la historia. Se decretan treguas en los frentes de batalla y por unas horas el mito de la fraternidad universal pretende surgir triunfante de la oscuridad de los horrores cotidianos, pero en México está noche es ocasión de pendencia creciente, de lucha en aumento, de bajezas, ruindades, abusos y maniobras innobles, pero la política es así y nadie nos debió haber empujado a suponer lo contrario.
Hagamos un reciento de las violencias políticas de estos días, porque si lo quisiéramos hacer las otras, no terminaríamos o acabaríamos empapados en sangre.
Como todos sabemos en el estado de Veracruz, ha sido promulgada una ley de la caverna. Se ha hecho ascender al trono de lo incontestable un delito mal especificado cuya denominación ya suena a feudalismo: ultrajes a la autoridad.
Y en el nombre de esa conducta, cierta o falsa; probada o sin demostrar, la gente va a la cárcel mientras el impresentable Cuitláhuac García, de nombre nunca antes tan merecido.
(¿usted sabe el significado etimológico de Cuitláhuac? Significa montón de mierda), detiene a sus opositores políticos uno más uno, como se llamaba aquel desaparecido periódico mexicano.
Y sobre ese espanto judicial nadie había levantado la voz. Pero Ricardo Monreal, presidente de la Junta de Coordinación Política lo hizo. Y emprendió la defensa de los agraviados por el autoritarismo más rupestre de todo el país.
Pero no sólo ha hecho eso: se ha visto desplazado del afecto presidencial desde el fracaso de la consulta para enjuiciar a los expresidentes (nadie tenía ganas, ni los expresidentes) y la derrota en las elecciones intermedias capitalinas, pues la “mano amiga” le procuró a Claudia Sheinbaum una salida decorosa ante su incapacidad política y la derrota en ocho alcaldías de la ciudad de México, cuando su responsabilidad era conservar las propias y conquistar las ajenas.
Pero Claudia y su equipo de cibernautas incompetentes fallaron. Estos “innovadores” hípster, son tan chafas, como si comparamos un “X” Box última generación o un I.Phone con un reloj de cuerda. Ellos son el Neza Pong.
A cambio de un buen trabajo político territorial (fácil para Morena con la entrega de dádivas), urdieron la leyenda de una traición de Monreal quien si tuviera esa fuerza ya la habría puesto en práctica.
Y como el zacatecano ha decidido jugar “por la libre” en la carrera adelantada por la candidatura presidencial del 2024, cuya nominación llevará al elegido a un triunfo estilo José López Portillo, sin enemigo real al frente, el presidente lo dejó de su mano. Retiró de su frente la palma salvadora, cesó de cubrirlo con el manto poderoso de su mirada y le retiró el plato de tamalitos de chipilín de los desayunos de media semana.
Una ángela con espada de fuego lo echó del Palacio Nacional y lo envió al este del paraíso.
Y ahí Cuitláhuac aprovechó la coyuntura y comenzó las hostilidades de manera verdaderamente brutal: metió a Pacho Viejo a Juan Manuel del Río Virgen, el secretario técnico de la Junta de Coordinación Política del Senado acusado de urdir el asesinato de un candidato a la alcaldía de Cazones, asunto sobre el cual hasta el presidente ya se había pronunciado hace casi seis meses.
Del Río se suma ahora a esta lista de víctimas del salvajismo político de García:
Azucena Rodríguez, ex diputada. Acusada del homicidio de Nicanor Martínez, precandidato de Morena en Tihuatlán; Tito Delfín. Candidato al PAN estatal. Detenido el 29 de noviembre por abuso de autoridad y fraude; Gregorio Gómez, ex candidato a la Alcaldía de Tihuatlán,m acusado de posesión de un auto robado, ultrajes a la autoridad y narcomenudeo; Eduardo Cásarez, empresario de centros de verificación vehicular, retenido por “ultrajes a la autoridad”; Rogelio Franco, candidato a diputado en Tuxpan, preso por “ultrajes a la autoridad” y Gustavo Díaz. Diputado electo, acusado de portación de arma. Un hijo suyo desapareció.
Y si en el velorio de doña Chuy todos eran muy honrados pero el rebozo de la señora no aparecía, esta noche de paz Del Río Virgen logra posada en Pacho Viejo, la misma prisión en la cual estuvo alojado el líder del Movimiento Ciudadano, Dante Delgado quien ahora deberá analizar con toda frialdad si prosigue su doble juego de apoyar y oponerse, como ha venido haciendo con medianos resultados.
Monreal hizo el miércoles pasado un video explosivo y lo puso a circular por las redes sociales del Senado. Y ayer ofreció junto con los integrantes de la junta política senatorial, una conferencia de prensa en la cual se anunció una comisión para revisar el caso de Del Río.
Pero frente a todo esto el señor presidente sentencia:
“…no voy a ser objetivo, pero le tengo mucha confianza al gobernador Cuitláhuac García, creo que es uno de los mejores gobernadores que ha tenido Veracruz en los últimos tiempos, porque mi estado, Veracruz, porque mi padre era veracruzano, padeció de muchos gobernadores mediocres y ladrones, y ese era el principal problema en Veracruz, y ahora por primera vez en bastante tiempo se tiene un gobernador honesto, íntegro, que es incapaz de llevar a cabo una injusticia en contra de nadie, le tengo toda la confianza”.
Así pues, podéis ir en paz (¿en pus?), la misa ha terminado.
