CIUDAD DE MÉXICO.- Dejados a su suerte, los pasajeros han tomado la costumbre de vengarse con quien los asalta.
Como César R, quien subió a un microbús por el rumbo de Iztapalapa y quiso despojar a la gente de sus propiedades
Llevaba una pistola de plástico y una navaja con la cual lesionó a una persona que opuso resistencia.
Como los pasajeros vieron que no disparaba, lo atacaron en grupo, lo despojaron de se falsa pistola y navaja, para luego golpearlo.
Lo apalearon cuando llegaron agentes de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, quienes se lo llevaron arrestado.
Los agentes también recibieron las pruebas del delito: un hombre lesionado y las armas con las cuales se les amagó.
Esto pasó anoche, pero los cargos son menores y pronto la Fiscalía General de Justicia (FGJ) de la Ciudad de México podría dejarlo en libertad.
Y él volvería a actuar con impunidad.