Por JOSÉ UREÑA
Dante Delgado sabrá qué hacer.
Creó la desaparecida Convergencia y tiene el nieto de aquel esfuerzo nacido del odio hacia Ernesto Zedillo, Movimiento Ciudadano (MC).
Ha conseguido mucho.
En primera instancia, la alcaldía de Oaxaca.
Luego el gobierno de oaxaqueño de Gabino Cué Monteagudo, a quien luego de promoverlo Andrés Manuel López Obrador catalogó como traidor.
Hoy Gabino está desaparecido de la política.
A aquellas conquistas han seguido varias alcaldías, diputaciones, senadurías y dos gobiernos estatales vigentes, el jalisciense con Enrique Alfaro y el nuevoleonés Samuel García.
Sobre ellos gira la insistente negativa de Delgado a unirse al bloque oficialista a Morena-PVEM-PT o a la oposición PAN-PRI-PRD-organizaciones sociales.
Estos representan, dicen el veracruzano y su merolico Salomón Chertorivski, la corrupción del pasado y por ellos no van ni a la esquina.
Pero, historia suya, ellos representan esa historia, ese desprestigio y esa corrupción porque provienen de aquel pasado, cuando Dante fue presidente del PRI veracruzano y gobernador de Veracruz bajo ese signo tricolor.
JALISCO ESTÁ PERDIDO
Pero el tema es otro.
Mientras la cúpula emecista se lanza contra la oposición, gran parte de su militancia ha comenzado la emigración hacia la oposición despreciada y criticada por Dante Delgado y Salomón Chertoviski.
La primera rebelión la escenificó el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, un estado donde no hay identificación con Movimiento Ciudadano, sino con su gobernador.
Son claves él y su escudero en el Senado de la República, el coordinador Clemente Castañeda, quien ha sido fundamental para incrementar la bancada y negocia la incorporación de los cuatro tránsfugas priístas.
Los dos saben, tanto como el coordinador del grupo emecista en la Cámara de Diputados, Jorge Alvarez Maynez, de su fuerza para retener la gubernatura.
Sin ellos MC está perdido y Morena engullirá a Jalisco en 2024, y justo en esas tendencias está su fuerza para someter a Dante Delgado y su presión.
Pero hay más: decenas de dirigentes de Movimiento Ciudadano en estados y municipios comienzan a respaldar no tanto al Frente Amplio por México, sino a Xóchitl Gálvez.
¡Ah caray! Aquí está la nota y tal vez el destino de las elecciones presidenciales y del destino del país para el año próximo.
SANDRA LLEGA TARDE
Sandra Cuevas lo ha decidido tarde.
Ha comenzado una serie de pláticas con los dirigentes de los partidos de oposición, el priísta Alejandro Moreno, el panista Marko Cortés y el perredista Jesús Zambrano.
¿Qué desea?
Ser candidata a jefa de Gobierno de la Ciudad de México porque su imagen es magnífica en la capital, sobre todo por sus enfrentamientos con Claudia Sheinbaum.
¿Qué ha encontrado?
Respuestas no muy favorables.
-Pues lucha -le contestan.
Sin ser promotores de ella, vale la pena un dato: hay muchos lugares morenistas como Iztapalapa donde Sandra Cuevas tiene magnífica imagen.
Nada nuevo porque los negativos de Claudia Sheinbaum y Clara Brugada superan los positivos y por lo tanto puede penetrar con muchas posibilidades de victorial
Pero no le será fácil superar la contienda interna del Frente Amplio por México porque ahí es mano el panista Santiago Taboada, en quien han puesto sus esperanzas Marko Cortés y toda la nomenklatura panista.
