CIUDAD DE MÉXICO.- Muchos puestos del alcoholímetro, pero de nada sirve.
No importa la hora, pues Claudia Sheinbaum ha dispuesto que al menos 30 de ellos estén permanentemente colocados las 24 horas del día para evitar que la gente maneje en estado de ebriedad.
Pero este sábado uno de ellos, totalmente borracho, embistió una peregrinación y dejó una docena de heridos, varios de ellos muy graves.
La propia jefa de Gobierno hizo el anuncio y precisó que el responsable fue detenido junto con su acompañante, para quienes se ha dispuesto la aplicación de la ley.
El primer resultado de esa orden, porque la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México y su titular Ernestina Godoy no disfrutan la autonomía que ordenan la Constitución capitalina y sus leyes.
En consecuencia, el chofer está formalmente preso y quien solamente iba de copiloto deberá presentarse cada semana a firmar y permanecerá bajo control judicial.
