
NOGALES.- Ella reía, le encantaba bailar, le gustaban y amaba a los animales, tenía 13 años cuando se metieron a su casa, la violaron, golpearon y asesinarón.
Ana Paola se quedó sola el pasado 2 de abril, en su casa, su madre tan solo salió a comprar víveres para continuar la cuarentena, al regresar encontró el cuerpo sin vida de su hija con visibles muestras de abuso sexual.
Al principio se especuló que fue un robo a la casa de la menor pero al revisar la vivienda se descartó, no fue robo, quien entró lo hizo con la única intención de ultrajar y matar a la menor.
Hoy todos pedimos #JusticiaParaAnaPaola
Con información de Gloria Lara