ELECCIONES CHARRÚAS
Por Eleazar Flores
¿DERECHA O IZQUIERDA?-. Para quienes están pendientes de todos los sucesos político-electorales de Sudamérica recuerdan que hoy se elige presidente en la república oriental de Uruguay nación tranquila en relación a lo que sucede con sus vecinos Bolivia y Venezuela.
Uruguay aún disfruta de la calma en que dejó a su país el último presidente José Alberto Mujica Cordano, mejor conocido como Pepe Mujica, tan bien recordado como su auto “vochito”.
DATOS-. Uruguay es un país con apenas 3 millones 600 mil habitantes, un padrón de 2.7 millones de inscritos y escasos 2 millones 435 mil votantes. Uruguay es de los pocos países en desarrollo donde el voto no solo es un derecho, también una obligación o multa para los abstencionistas e incluso negación para realizar trámites en oficinas de gobierno. Así que a votar charrúas.
Uruguay es famoso por la sobriedad de sus políticos en los que es mano Pepe Mujica, pero también trascienden fronteras destacados deportistas, principalmente de futbol, como el internacional Luis Suárez en España. En México las mejores épocas de los charrúas pasaron en el siglo veinte con el ex toluco Roberto Matosas, papá del ex técnico crema y leonés metido en líos.
CANDIDATOS-.Las elecciones presidenciales en primera vuelta se celebraron el pasado 27 de octubre, proceso en el que participaron casi una decena de aspirantes. En segunda vuelta quedaron, como se esperaba, Daniel Martínez Villamil del Frente Amplio y Luis Lacalle Pou del partido colorado, con aparentes ligas al actual mandatario Tabaré Vázquez.
Ramón Tabaré Vázquez Rosas es presidente por segunda ocasión ya que la primera la ejerció del primero de marzo de 2005 hasta el 2010.
Apueste y ganará a que haya ganado quien haya ganado la elección de ayer, los uruguayos aceptarán el resultado, pues en análisis de procesos anteriores, no se han registrado mayores reclamos que los de posibles malos conteos sin llegar a la violencia, cuando menos en los últimos años y se ve difícil que ahora suceda lo contrario.
Obvio que los observadores políticos están atentos a posibles virajes hacia la derecha o a la izquierda, máxime que en el vecino país de Bolivia se efectuarán en el primer trimestre del año próximo nuevas elecciones, al desconocerse el resultado en el que el exiliado Evo Morales ganó la elección, tan discutida que lo obligaron a refugiarse en México.
Esto en función de su amistad con el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, elogiada por algunos y cuestionada por la mayoría de la población.
Tan cuestionado refugio a Evo como el discutido proceso para renovar la dirigencia en el Movimiento de Regeneración Nacional, MORENA.
