CIUDAD DE MÉXICO.- Al rendir su tercer informe de labores, con la asistencia del presidente Andrés Manuel López Obrador, señaló que durante su gestión se lograron desmontar las estructuras de poder y redes clientelares de abogados y despachos que traficaban influencias al interior de juzgados y tribunales.
Indicó que en ese poder ya no existen “cotos de poder y privilegios” y los casos de corrupción, dijo, son hechos aislados, por lo que manifestó que a las instituciones no se defienden con el silencio y los “trapos sucios (de la Suprema Corte) no se lavan en casa”.
Resaltó que se ha combatido el nepotismo y actualmente en ningún juzgado o tribunal sus titulares tienen a familiares trabajando sin haber pasado por un proceso de selección.
Aseguró que se ha consolidado un sistema meritocrático para acceder a las plazas judiciales a través de proceso transparentes, por lo que quedó desterradas las prácticas de otorgar trabajos a conocidos, familiares y amigos.
Otra de sus causas es la paridad de género e igualdad laboral en el Poder Judicial de la Federación, por lo que destacó que el 70% de nuevos nombramientos en juzgados han sido de mujeres.
Respecto a la austeridad, indicó que, comparado con el presupuesto de 2018, anualmente se han ahorrado 7 mil millones de pesos.
“El pueblo de México ha soportado por años una justicia que es como serpiente solo muerde a los que están descalzos”, señaló.
Con información de 24 Horas