CIUDAD DE MÉXICO.- A mediados de 2021 podría estar lista la vacuna contra la COVID-19, en la que trabaja el Instituto de Investigaciones Biomédicas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), junto con otras instituciones, reveló la científica mexicana Edda Sciutto.
“Hemos demostrado que esta vacuna, este candidato vacunal, induce una respuesta efectiva en animales de experimentación y estamos organizándonos para empezar las pruebas preclínicas, con el propósito de empezar en enero las pruebas clínicas y contar a mediados del próximo año con una vacuna mexicana”, señaló.
Durante la mesa redonda “La ciencia mexicana frente a la pandemia del COVID-19”, Edda Sciutto manifestó que el equipo que trabaja en la vacuna mexicana tiene un “candidato vacunal”.
“Este candidato vacunal, que es una molécula pequeña, una proteína pequeña, es una proteína que es parte del virus que podría interaccionar con la célula huésped e infectar. Entonces, al inducir una respuesta en contra de esta molécula, podemos inhibir la infección viral”, explicó.
Por otra parte, reconoció que hay muchas vacunas avanzadas en otros países, que llegarán a México antes de que la realizada por la UNAM esté lista; sin embargo, dijo, eso no significa que su aplicación será rápida y generalizada.
En este sentido, el doctor Carlos Federico Arias, investigador del Instituto de Biotecnología de la UNAM, opinó:
“Tendremos vacunas quizás a mediados del próximo año ya disponibles; sin embargo, la cantidad de vacunas que vamos a tener disponibles para el país no va a ser suficiente para toda la población”.
UNAM desarrolla muestras de saliva para evaluar coronavirus
Un equipo de científicos de la UNAM diseñó un método para detectar al SARS-CoV-2 mediante saliva; este procedimiento, además de disminuir el riesgo para el personal de salud y acelerar el diagnóstico, es 50 por ciento más económico que la recolección de muestras con hisopos en nariz y garganta.
Dos mililitros de saliva son suficientes y eficaces, afirmó Susana López Charretón, del Departamento de Genética del Desarrollo y Fisiología Molecular del Instituto de Biotecnología (IBt), quien junto con su equipo han aplicado este modo en pacientes de Morelos.
“Con el método de la saliva se puede hacer la autotoma, con lo que se ahorran insumos y el procesamiento puede ser más rápido… Esto no tiene nada qué ver con la prueba diagnóstica, que sigue siendo el RT-qPCR, el indicador de oro para la detección del virus”, aclaró.
Con información de la Gaceta UNAM
