SAN LUIS POTOSÍ, SLP.- La muerte de Aurelio Gancedo Rodríguez, expresidente del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y presidente del Instituto Reyes Heroles de formación de cuadros en este mismo instituto político, recibió una condena unánime y el clamor fue contundente: esclarecer los hechos.
Fue un día largo para la clase política de la entidad. Por la mañana de este miércoles, corría el rumor de que Gancedo estaba desaparecido, lo cual confirmó la Fiscalía General de Justicia (FGE) que emitió una ficha de búsqueda.
«Carpeta de investigación para localizar a Aurelio Gancedo Rodríguez, 39 años de edad. Si tienes datos o cualquier información de su paradero, llama al (444) 204 0413, (444) 812 4961 y 800 752 6237».
Esta imagen circuló como pólvora en todos lados y comenzaron las especulaciones.
La ficha indicaba que Gancedo tenía como seña particular una cicatriz en el ojo derecho y otra en el brazo derecho y su estatura era de 1.70 metros. Las redes sociales hicieron su parte y comenzaron a circular la información.
Quien en su momento también fue funcionario de la Procuraduría General de la República (hoy Fiscalía) en tiempos de Jesús Murillo Karam, había sido visto a bordo de su vehículo Mini Cooper, modelo 2015, color blanco, placas de circulación NGK6011 del Estado de México.
Frío, sin mediar palabra y evadiendo hasta con la mirada la presencia de comunicadores, el fiscal general Federico Garza Herrera, eludió hablar la mañana de este jueves sobre la violenta muerte del priísta Aurelio Gancedo Rodríguez, que cimbró a la política local.
Así se enfiló, impávido, a su participación en el desayuno empresarial de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) para la Prevención del Delito de Secuestro y Extorsión.
Con un plato de fruta y el imperdonable café, ocupó una de las mesas principales en el evento, realizado en el hotel Fiesta Americana.
Ahí los empresarios pidieron guardar un minuto de silencio en memoria de Gancedo Rodríguez, ex presidente estatal del PRI.
