POR Eleazar Flores
REVOCACIÓN, CON TODAS LAS REGLAS. ‘Y LOS PARTIDOS?
NI CAPRICHOS NI PROTAGONISMOS-. En el marco de la insistencia para celebrar la revocación de mandato que se haga con estricto apego a la ley, sin delegar a nadie lo que a la autoridad toca.
Decir que “la haga el pueblo” es mayúscula frivolidad pues se le exigiría al autor de la frase que responda, quién organizaría la operación, quién escogería al “pueblo” ejecutor y quien contaría los votos y en el supuesto de errores a quién se le culparía. ¿verdad que no es fácil?.
Otra propuesta del padre de la cuarta transformación anunciada la semana pasada es que se pusieran menos casillas, lo que también sería caer en ilegalidad, que al parecer es la orilla que se quiere en que caiga el Instituto Nacional Electoral, para así tener las armas suficientes para que el poder público pudiera someter a juicio político a los presuntos infractores de la ley.
Actuar con legalidad para la revocación de mandato significaría que el Instituto Nacional Electoral tuviera la capacidad de infraestructura y de recursos humanos, que se encargarían de instalar y atender a las 160 mil casillas el próximo mes de abril, que estarían a cargo de más de un millón de ciudadanos de todos los colores, dispuestos a colaborar con la autoridad electoral.
Por todo lo anterior seguramente ha llegado a la conclusión de que es fácil decir pero muy difícil cristalizar el pronunciamiento de que “el pueblo haga la revocación de mandato”.
Ojalá y hubiera suficiente inteligencia y apertura de todas las partes, pero más de las que ostentan el poder, como para ceder y conceder apreciaciones y apoyos para llevar a buen puerto este ejercicio que a pesar de que sería el primero, ya sabemos el resultado y quien no lo acepte estaría pecando de ingenuidad ¿o no?.
PARTIDOS MILLONARIOS-. Es hasta sospechoso que cuando se rasgan vestiduras por falta de dinero para hacer la revocación de mandato, los dirigentes de los partidos políticos no digan nada sobre el tema, no obstante que están sobrados de recursos para dar y prestar.
En números cerrados, MORENA dispondrá para 2022 la nada despreciable suma de mil 800 millones de pesos, el PAN tendrá mil 200 millones y el PRI unos m il millones de pesos. Si nos acordamos de la chiquillada partidista compuesta por PT, PVEM y PRD, a la suma total apenas se le daría un pequeño “pellisco” para aportarlo al INE .
Con esos dineros, no solo alcanzaría sino hasta habría sobrantes para llevar a cabo la Revocación de Mandato.
Por eso extraña el silencio partidista, sobre todo del más riquillo de todos.
