Ofrecen recompensa millonaria por Juan Antonio Vera Hernández, agresor de la saxofonista María Elena Ríos

OAXACA, Oax.- La Fiscalía General de Oaxaca ofreció una recompensa de hasta un millón de pesos para quien contribuya a la búsqueda y localización de Juan Antonio Vera Hernández.

Juan Antonio Vera Hernández es el hijo del exdiputado del PRI, Juan Antonio Vera Carrizal, quien está detenido por tentativa de feminicidio en contra de María Elena Ríos.

La Fiscalía General del Estado (FGJO) emitió la ficha de búsqueda y localización de Juan Antonio Vera Hernández, quien habría participado en el ataque planeado presuntamente por su padre en contra de la saxofonista.

Por el ataque con ácido sulfúrico en contra de María Elena Ríos están detenidos dos presuntos autores materiales y dos intelectuales.

En la ficha, la Fiscalía detalla que Juan Enrique Vera Hernández tiene 36 años de edad, nació en Silacayoapam, Oaxaca, es de nacionalidad mexicana, mide 1.65 metros de altura, tiene ojos negros y cabello negro, así como muestra una fotografía de la persona.

La emisión de la ficha se dio dos días después de que se dio a conocer que los juzgados primero y décimo de distrito en Oaxaca otorgaron una suspensión para desbloquear las cuentas de Juan Vera Hernández, hijo del principal agresor de María Elena.

Ante está decisión, la Unidad de Inteligencia Financiera que dirige Santiago Nieto interpuso un recurso ante tribunales para modificar la determinación que los jueces oaxaqueños tomaron de manera unilateral para favorecer a los presuntos agresores.

A través de su cuenta de red social, María Elena Ríos recordó que desde 2019, Juan Vera Hernández cuenta con orden de aprehensión por el intento de femincidio del que fue víctima.

Con información de 24 Horas

Comentarios

Tags

Noticias recientes

El Frente opositor se fortalece en lugares y con candidatos sorpresivos

La coalición Fuerza y Corazón por México asciende en las preferencias en lugares que creía perdidos y con candidatos inesperados

Retenes, montajes y negación

Los retenes carreteros son tolerados por el gobierno y producen mucho dinero (normalistas) o mucho temor