CIUDAD DE MÉXICO.— México vive un paro nacional de mujeres este nueve de marzo (#9M), donde ninguna se mueve.
El movimiento al que se convocó para este lunes por activistas y organizaciones civiles, que logró modificar la vida cotidiana de diversas ciudades del País, para hacer énfasis en las diversas expresiones de violencia que viven ellas y la impunidad que persiste.
La Colectiva feminista de Veracruz Brujas del Mar fue quien convocó en primera instancia a este paro nacional a una movilización, desmarcándose de todos los partidos políticos y aceptando con respeto “las diferentes corrientes dentro del feminismo” pero sin tolerar “ninguna imposición de ideas que busquen polarizar y/o crear desde la controversia cualquier tipo de problema”.
Las activistas exaltaron en todo momento una participación unificadora y pacífica, pidiendo apoyo de la ciudadanía para evitar que actores ajenos a la causa desvirtúen el movimiento para ser un parteaguas en la sociedad. La idea es imponer en el imaginario de los hombres que sus mujeres más cercanas desaparezcan, por la razón que sea.
Así como diariamente desaparecen al menos 10 de ellas en México, y que en muchos de los casos son localizadas muertas, víctimas de feminicidio.
En la conferencia matutina del presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, en el Salón Tesorería del Palacio Nacional, sólo estuvieron seis mujeres, cuando por lo general ocupan un 50 por ciento de los lugares acreditados para la prensa.
En el Sistema del Transporte Colectivo (STC) Metro, también hay estaciones donde las taquillas están vacías, como en la estación Sevilla de la Línea 1, Zócalo de la 2, y Tlatelolco de la Línea 3.
En escuelas y universidades, tanto públicas como privadas, también se sumaron al paro nacional de mujeres del 9M, como son los casos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el Tecnológico de Monterrey y la Universidad Iberoamericana.
