CIUDAD DE MÉXICO.- Antes los llamaba “parte de la mafia del poder”.
Pero hoy Andrés Manuel López Obrador se hará acompañar de los magnates mexicanos, pero ningún dirigente del empresariado orgánico.
No va, por ejemplo, el presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Carlos Salazar, quien ha intentado en vano citas en Palacio Nacional.
-Nos han cerrado las puertas -dijo Salazar la última vez que accedió para entregar un proyecto anti crisis del CCE.
Ni siquiera fue informado de quiénes asistirían, como tampoco van dirigentes de Coparmex, Concamín, Canacintra, Conanaco y demás instituciones del sector privado.
Mañana, durante la cena en la Casa Blanca con Donald J. Trump, lo acompañarán los once hombres de negocios que, se supone, lo asesoran en materia económica.
Ellos son, confirmó la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), además de la comitiva presidencial:
Patricia Armendáriz Guerra (Financiera Sustentable).
Carlos Bremer Gutiérrez (Grupo Financiero Value).
Daniel Chávez Morán (Grupo Vidanta).
Bernardo Gómez Martínez (Grupo Televisa).
Francisco González Sánchez (Grupo Multimedios).
Carlos Hank González (Grupo Financiero Banorte).
Miguel Rincón Arredondo (Bio Pappel).
Ricardo Salinas Pliego (Grupo Salinas).
Marcos Shabot Zonana (Arquitectura y Construcción).
Carlos Slim Helú (Grupo Carso).
Olegario Vázquez Aldir (Grupo Empresarial Ángeles).
La cena de trabajo, como el resto de la visita presidencial, tiene el objetivo de celebrar la entrada en vigor del T-MEC y explorar las nuevas posibilidades que ofrece el acuerdo para aumentar la inversión, el empleo y el bienestar de la población en ambas naciones.
