POR Eleazar Flores
GUERRERO INSEGURO, CON JEFES MILITARES O MARINOS
¿Y DON FÉLIX?, FELIZ-. Con altos niveles de inseguridad y violencia, aun con mandos militares o marinos al frente, el estado de Guerrero sigue llamando la atención por frecuentes hechos violentos, incluidas pérdidas de vidas, lo mismo en Iguala, Taxco, Chilpancingo o el mismísimo Acapulco.
Iba a escribir que “sigue preocupando” pero recordé el baile que el senador Félix Salgado Macedonio exhibió para aclarar que quienes atacan a Acapulco es porque no lo conocen, si, don Félix, el padre de la gobernadora Evelyn, aun cuando muchos creen que quien gobierna es papá.
CAMBIOS-. En los CASI TRES AÑOS que lleva el gobierno de Evelyn Salgado Pineda, -asumió el cargo el 15 de octubre de 2021-, la mandataria lleva ya tres mandos policiacos entre MILITARES Y MARINOS, por lo que quien llegue entre esta y la próxima semana sería el cuarto.
El primer Secretario de Seguridad Pública de Guerrero fue el marino Evelio Méndez López y el segundo fue el militar Rolando Solano Rivero, quien se vio obligado a renunciar por la muerte del estudiante normalista de Ayotzinapa Yanqui Kothan y el tercero, hasta ayer, fue otro militar, Gabriel Zamudio López, quien asumió el cargo apenas el pasado 24 de marzo, o sea que no duró ni cuatro meses.
VIOLENCIA AL DÍA-. Por la dinámica de hechos violentos que lastimosamente se registran en todo el país pero en este caso se enfocan en el estado de Guerrero, parecen lejanas las fechas en que se reportaron hechos violentos, secuestros y quema de unidades de transporte público en Taxco, tanto que los oficios religiosos de Semana Santa se suspendieron en la icónica catedral de Santa Prisca.
También hechos violentos en Iguala, la capital Chilpancingo y del paradisiaco Acapulco ni hablar, quema de vehículos urbanos y taxis, todo por la imposición de las cabezas del crimen organizado que exigen cuotas y derecho de piso hasta a los pequeños comerciantes ambulantes de la costa.
Acapulco en desgracia, luego de los estragos causados por el HURACÁN OTIS, de categoría 5 destrozando hoteles, playas pero sobre todo comercios y casas humildes del Acapulco pobre, ese que el presidente Andrés Manuel López Obrador jamás visitó, -seguramente para no deteriorar sus zapatos, -pues recuerde que dos pares son suficientes-, pero eso sí, estuvo varias veces en las instalaciones militares, que quede claro.
El huracán OTIS se registró del 22 al 25 de octubre del año pasado. Qué rápido pasa el tiempo.
Pues Acapulco, pero también pueblos importantes de Guerrero, siguen padeciendo inseguridad, con la esperanza de que el próximo Secretario de Seguridad, que seguramente será militar o marino, pueda tener éxito en la lucha contra cabezas y grupos del crimen organizado, platicando incluso con la jerarquía católica, inmersa en el tema.
