CIUDAD DE MÉXICO.- La furia femenina explotó hoy a las puertas de Palacio Nacional.
Mujeres con cáncer y sus familiares se manifestaron frente a la sede del Poder Ejecutivo y, en un acto de rabia, clausuraron la puerta Mariana.
-¡Cáncer no, vida sí! -coreaban ante la mirada sorprendida de los vigilantes, quienes nada pudieron hacer por el acto simbólico.
El conglomerado protestaba por el retiro de apoyo gubernamental a la Fundación de Cáncer de Mama (Fucam), la cual ha debido suspender los tratamientos de cientos de pacientes.
Llegó con un gran manta colocada al frente que decía en letras mayúsculas:
“El gobierno abandonó a mujeres con cáncer. Amigos de Fucam”.
Inclusive les ha entregado sus expedientes para que busquen respaldo en otros lados, bien sea entidades de gobierno y hospitales privados.
Muchas de ellas tienen acceso a instituciones de previsión social como los institutos Mexicano del Seguro Social (IMSS) y de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores (ISSSTE).
Sin embargo, aseguran que no son tratadas oportunamente y les argumentan tanto la falta de personal médico y de equipos como de medicamentos para su enfermedad.
Mientras ellas clausuraban la puerta principal de Palacio Nacional, adentro el subsecretario Hugo López-Gatell aseguraba que ninguna se quedará sin la atención.
Aseguró que desde el año pasado se mejoraron los protocolos y el surtido de fármacos a fin de cubrir las necesidades y que ninguna de ellas se quedará sin atención.
El conflicto no pasó a mayores, aunque sí quedó en marcha la instrucción de Andrés Manuel López Obrador: no se darán más recursos públicos a Fucam y quien quiera atenderse deberá acudir a hospitales oficiales.
