CIUDAD DE MÉXICO.- El Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) y sus aliados echaron a andar la maquinaria para desaforar al gobernador de Tamaulipas, Francisco García Cabeza de Vaca.
El mandatario panista es acusado de varios delitos: delincuencia organizada, lavado de dinero y otros a petición de la Fiscalía General de la República (FGR).
La Sección Instructora, presidida por el morenista Pablo Gómez, está lista para dar gusto a Andrés Manuel López Obrador, quien está molesto por los desafíos de Cabeza de Vaca.
Este le reprochó que se dé crédito a “un delincuente confeso como (Emilio) Lozoya”, quien ha involucrado a muchos políticos en el supuesto cobro de dinero para votar a favor de la reforma energética del sexenio pasado.
Uno de los señalados es precisamente García Cabeza de Vaca y otro el gobernador de Querétaro, Francisco Domínguez, así como otros prominentes panistas.
Este sábado los diputados de Morena, PES, PT y PVEM acordaron radicar el expediente en la Cámara a fin de abrir el juicio de procedimiento, en demérito de otros casos con prelación.
Una vez notificado, el gobernador de Tamaulipas tendrá siete días para comparecer por escrito y manifestar, dice la legislación, “lo que a su derecho convenga”.
Eso bajo el supuesto que haya derecho en este país contra instrucción presidencial.
