OBEDIENTE-. “CRÓNICA DE UNA ORDEN OBEDECIDA”, podría ser el resumen de la primera gira del presidente Andrés Manuel López Obrador a la Unión Americana, para entrevistarse con el mandatario Donald Trump, y posiblemente el premier canadiense Justin Trudeau.
De entrada, qué bueno que el padre de la cuarta transformación salga, lo malo es que mientras allá Trump lo dio por hecho la tarde del martes, aquí lo negaba por la noche el canciller azteca.
TIEMPOS-. Todo lo anterior lo único que demuestra es que fue el mandatario norteamericano quien anunció la ida a los Estados Unidos del presidente López Obrador y que si aquí lo ratifica ese mismo día el secretario de Relaciones Exteriores Marcelo Ebrard hubiera sido bueno, pero dubitativo declaraba “aún no hay nada concreto sobre el particular”, lo que sembró la duda.
En la mañanera del miércoles ya no solo el canciller sino hasta el propio presidente López Obrador aceptó que en efecto, existía una invitación del presidente Trump para tratar entre muchos asuntos, el relacionado a la entrada del T-MEC el primero de julio como se ha venido manejando desde hace tiempo en los gobiernos de Estados Unidos, Canadá y por supuesto de México.
Es así que parece que más que invitación fue una orden de Trump a AMLO, viajar a la capital yanqui, justamente cuando el presidente-candidato busca reelegirse para un segundo periodo, lo que trae a la memoria fechas y sucesos poco gratos para la política mexicana, específicamente para el entonces presidente Enrique Peña Nieto y su operador de esta visita Luis Videgaray Caso.
TRUMP-PEÑA-. En plena campaña presidencial, tanto en Estados Unidos como en México, el presidente Peña y su gabinete reciben al entonces candidato Donald Trump que iba abajo en las encuestas que encabezaba la señora Hillary Clinton. La visita casi de estado que se le dio a Trump provocó críticas de la clase política, partidos de oposición y por supuesto AMLO
Tanta fue la ayuda que Trump avanzó en las encuestas y finalmente ganó la elección, que aprovechó Peña Nieto después para destacar las bondades de dicho acercamiento.
PASARÁ LO MISMO. Cuatro años después se repite la película, Trump va abajo del candidato demócrata John Biden en las encuestas, con diez y hasta quince puntos de diferencia, por lo que la visita-encuentro que tendrá con el presidente Andrés Manuel López Obrador la beneficiará, máxime que quien busca la reelección necesita del voto latino y en Estados Unidos hay muchos.
La posible presencia del canadiense Justin Trudeau podría pasar a segundo término, no obstante la importancia del T-MEC que entrará en vigor el primero de julio
Primero están los votos.
