CIUDAD DE MÉXICO.- Derrotado y cabizbajo, el presidente Donald Trump apareció en las pantallas de televisión para denunciar fraude.
“Si contamos los votos legales, ganamos fácilmente… (Pero) si cuentas los ilegales, nos van a tratar de robar”, dijo al comenzar.
De inmediato las principales cadenas noticiosas de Estados Unidos interrumpieron sus transmisiones porque, señalaron, el magnate acusaba sin pruebas.
Trump está cercado por los resultados y su oponente Joe Biden, quien está a unos cuantos votos electorales para declararse y ser declarado candidato ganador.
Esta madrugada algunas agencias y televisoras asignaban 264 votos electorales al demócratas, por apenas 214 del republicano.
Esto significaría que Biden está a únicamente un estado -le bastaría el más pequeño, Nevada, porque significa seis votos-, mientras Trump requiere los tres en liza.
Faltan de terminar la contabilidad, además de Nevada, los estados de Carolina del Norte, Georgia y Pensilvania, donde su triunfo está en riesgo.
El todavía habitante de la Casa Blanca tiene otro problema: su credibilidad, razón por la cual no transmitieron completo su mensaje las cadenas ABC, CBS y NBC.
Sí lo hicieron, en cambio, CNN y Fox News.
El recuento de votos se ha centrado básicamente a boletas enviadas por correo antes del 3 de noviembre, las cuales favorecen mayoritariamente al candidato demócrata.
Con las tendencias en contra, el aspirante republicano a la reelección acusa fraude y con ello siembra dudas sobre las elecciones, actitud que ha mantenido desde antes de las votaciones.
-Nuestro objetivo es defender la integridad de la elección -ha repetido sistemáticamente.