Por Eleazar Flores
PONIATOWSKA Y FUENTES, INSPIRACIÓN PURA
FIN DE SEMANA-. Sé que ya está cansado-a de tantos descorches presidenciales, ataques a la UNAM, violencia, aumentos salariales, -pero sólo al pueblo uniformado y ser del comité de recepción a la llegada de médicos cubanos, por lo que procede recordar a nuestros literatos ilustres, Elena Poniatowska y Carlos Fuentes.
ELENITA-. En homenaje a su nonagésimo aniversario de productiva y envidiable vida, con gusto va su nombre completo así me lleve un renglón, Helene Louise Amélie Paula Dolores Poniatowska Amor, que ayer justamente cumplió nueve décadas, de las cuales la mitad o más las ha dedicado a escribir libros o sus imperdibles aportaciones en diversos medios impresos.
No imposible pero por lo reducido de este espacio , imposible enumerar todos los títulos escritos por la franco-mexicana, por parte de su mamá, faltaba menos, pero hay referentes de cita obligada por el tema o la obligación que nos pusieron nuestros maestros de Literatura en la Preparatoria, para leerlos y después comentarlos e incluso formar parte de nuestra evaluación.
Se trata del libro La Noche de Tlatelolco, narrativa del movimiento del 68 en el que muchos jóvenes estudiantes perdieron la vida, muchísimos más de los que el gobierno reconoció y publcó en prensa de ese entonces. Con decirle que en el campo militar número uno “lucían” decenas o cientos de pares de zapatos de los estudiantes-víctimas.
Muchos y prestigiados reconocimientos ha recibido Elenita, todos ellos apreciados pero seguramente uno de los más es el Premio Cervantes. Y en cuanto a películas, seguramente ha visto una y muchas veces acompañado-a, u obligado por sus hijos o nietos, la película Coco, en la que la Poni, como le dicen sus allegados, tuvo algo o mucho que ver.
FUENTES-.Otro mexicano internacional, formado igual que Elenita en épocas del hoy odiado neoliberalismo y conservadurismo, es el inmortal Carlo Fuentes, cuya muerte el 15 de mayo de 2012, le frustró el anhelo de obtener el Premio Nobel de Literatura.
También por cuestiones de espacio sólo alcanza a citar pocas de sus muchas obras, todas de lectura obligada para quien quiera ingresar a la aventura de escribir.
Algunas de esas obras son La región más transparente, La Muerte de Artemio Cruz y por supuesto Aura, cuya reimpresión fue obligada en el sexenio del foxismo, cuando el secretario de Gobernación Abascal prohibió a su hija leer dicha obra por considerarla escandalosa y hasta pornográfica, vaya usted a saber el pensar de Abascal para “proteger” a su hija de semejante texto.
Al igual que Elenita, también Fuentes se hizo acreedor al premio Cervantes y muchos más, y en aniversario de la primera y del fallecimiento del segundo, imposible ignorarlos.
