DORTMUND.- Se terminó la agonía para los fanáticos al futbol, sobre todo, de la Bundesliga de Alemania.
El primer gol anotado en el regreso del futbol de primer nivel fue obra de la superestrella juvenil Erling Haaland, quien encontró un buen centro por derecha para mandar el balón al fondo de las redes y celebrar con un baile de forma individual mientras sus compañeros lo felicitaban a unos dos metros de distancia.
El primer partido entre el Borussia Dortmund y el Schalke 04 terminó con un contundente 4-0, sin embargo, la nota aquí es el regreso de una de las ligas más reconocidas del mundo, marcando la pauta de una nueva realidad en el mundo del deporte tras la pandemia por el coronavirus Covid-19.
Protocolos estrictos
A pesar de que durante el juego hubo mucho contacto entre los jugadores, previo al inicio el protocolo fue seguido de forma estricta por ambos equipos.
Los jugadores salieron al campo con distancia respecto unos de otros. Incluso en el volado los capitanes estaban separados por lo menos dos metros.
En las bancas, el cuerpo técnico portaba su cubrebocas, aunque los técnicos Lucien Favre, del Dortmund, y David Wagner, del Schalke, no portaban ninguna mascarilla de protección.
Todos estas medidas, se realizaron ante un estadio completamente vacío, pero con sonido ambiente de las tribunas llenas que no volverán en un buen rato.
