CIUDAD DE MÉXICO.- De manera inédita este lunes la Cámara de Diputados y el Senado de la República llevaron a cabo la sesión de Congreso General de apertura del último período ordinario de sesiones del tercer año de la 64 Legislatura de manera no presencial, es decir, a distancia, y donde solo estuvieron presentes las mesas directivas de ambas cámaras.
Lo anterior debido a las condiciones especiales que vive el país y específicamente la Ciudad de México que se encuentra en semáforo rojo por la emergencia sanitaria por el coronavirus, por lo que, según el acuerdo definido, el resto de los legisladores, quienes registraron su asistencia a través de la plataforma digital específica para ello, estuvieron presentes de manera remota a través de la plataforma zoom.
Con un quórum de 361 diputados y 100 senadores, en una sesión de apertura de apenas siete minutos, se dio a conocer que el Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador envió una iniciativa preferente para reformar diversas disposiciones de la Ley de la Industria Eléctrica, misma que se turnó para su análisis y dictaminación a la Cámara de Diputados.
De acuerdo a los primeros datos, dicha iniciativa busca fortalecer a la Comisión Federal de Electricidad (CFE), la cual, según el documento, quedó fracturada, casi en ruinas, endeudada y con capacidad productiva disminuida a consecuencia de la reforma energética llevada a cabo por el anterior gobierno federal.
Según el Ejecutivo federal, el objetivo de esta iniciativa es garantizar la confiabilidad en esta empresa del Estado, así como sostener el compromiso de largo plazo con la población de no aumentar las tarifas eléctricas, las cuales solo se actualizarán de acuerdo a la inflación.
Luego de dar a conocer a los legisladores la llegada de esta iniciativa preferente, y darle turno, la presidenta del Congreso, que es también de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Dulce María Sauri Riancho, levantó la sesión de Congreso General y citó a los diputados a sesión semi presencial el próximo miércoles 3 de febrero.
De acuerdo a la ley del Congreso, los diputados tienen hasta 31 días naturales para discutir y votar esta iniciativa; si al término de este plazo no se ha resuelto, deberá ser el primer tema a abordarse en la siguiente sesión del Pleno camaral.
Recordemos que la mayoría de los legisladores federales buscará su relección en los comicios de junio próximo, por lo que también se encuentran en plena campaña.
Con información de Quadratín CDMX
