CIUDAD DE MÉXICO.- Con la puesta en marcha del plan Anticorrupción y de Promoción de la Integridad para Aduanas de México, implementado desde el Gobierno Federal, inicia una nueva era en los recintos federales del país.
En este contexto trabajadores aduanales manifestaron su inconformidad a través de diversos medios respecto a la servidora pública Lorena Urrea García, Administradora Central de Evaluaciones de Comercio Exterior, ya que piden que el combate a la corrupción sea de manera pareja, si bien es cierto que hay mucho que mejor en las oficinas aduanales existen algunos mandos que deberían ser investigados.
Urrea García es señalada por ejercicio indebido del servicio público, derivado de probables intereses personales que en palabras de los inconformes están concentrados en las aduanas de Lázaro Cárdenas, Veracruz y el aeropuerto de la CDMX.
Lázaro Cárdenas, así como la aduana de Veracruz y del aeropuerto de la CDMX, son administradas por Julián Manuel Otañez Calza, José Antonio Toledano Castell y Rodolfo Torres Chávez, respectivamente.
Ambos recintos marítimos son considerados fundamentales en la entrada y salida de mercancía, en los últimos años ha aumentado la recepción de diferentes precursores químicos, los cuales son utilizados en la fabricación de drogas sintéticas, en los que destaca el fentanilo. La aduana del aeropuerto de la CDMX es uno de los centros neurálgicos de comercio a nivel nacional.
Los empleados solicitan se investigue la actuación de Urrea García, a fin de deslindar responsabilidades y continuar con la transformación de las aduanas.
