CIUDAD DE MÉXICO.- Para efectos políticos y jurídicos, el gobierno mexicano protege a un prófugo de la justicia boliviana: al ex presidente Evo Morales.
Este jueves el fiscal del Departamento de la Paz, Williams Alave, informó que hay una notificación de búsqueda emitida por la Organización Internacional de la Policía Criminal (Interpol).
Esta situación compromete la actitud del gobierno mexicano, pero da una certidumbre: si el ex dictador fuera detenido en México, las autoridades jamás lo entregarían para su extradición.
Dijo Alave a la prensa:
“A través de Interpol se activó esta alerta azul, lo que significa que esta persona (Evo Morales) está siendo investigada y las policías internacionales lo que hacen es conocer de esa investigación que se tiene a efectos de tomar en cuenta para cualquier tipo de circunstancia”., afirmó Alave a la prensa local.
“Se ha coordinado este trabajo de investigación en contra de Morales, se está coordinando el trabajo de investigación con otros equipos y con otros casos”, agregó el fiscal, de acuerdo con el periódico La Razón.
Los cargos instaurados por la justicia de Bolivia contra su ex mandatario del Movimiento al Socialismo (Mas) son terrorismo, sedición (acaso el más importante), financiamiento del terrorismo, alzamiento armado, instigación pública a delinquir y otros.
Esta información confirma lo dicho el pasado 12 de noviembre por el propio Morales: la Interpol emitió una orden de búsqueda internacional en su contra con notificación azul en diez naciones.
Para protegerlo, el gobierno mexicano le quitó la residencia oficial que le prestaba en el Campo Marte, pero le mantiene la protección militar conformada por ex integrantes del actuante pero oficialmente desaparecido Estado Mayor Presidencial (EMP).
