CIUDAD DE MÉXICO.- Estos son otros Pumas.
Ambiciosos, osados, incisivos.
Y tocaron y tocaron la puerta del campeón Monterrey sin que Barbero les abriera y por ello la abrieron solos.
Una sola vez, pero eso bastó para el 1-0, el triunfo y el liderato momentáneo.
Fue al minuto 75 cuando, tras tanto insistir, hubo un centro de la derecha, Carlos González tiró de taconcito, Barbero rechazó y Juan Pablo Vigón le dio con la cabeza y así se consumó todo.
Luego quisieron reaccionar los campeones, pero la anotación fue en fuera de lugar y no hubo más.
