CIUDAD DE MÉXICO.- Las remesas dieron un salto descomunal durante marzo para situarse 49 por ciento arriba a febrero y acaso se deba a apoyos para la pandemia del coronavirus.
Es el incremento mayor de un mes a otro desde que se inició el registro de estas aportaciones de mexicanos en el extranjero, fundamentalmente Estados Unidos.
Este comenzó en 1995 y la recepción de dólares se ha convertido en el unico sostén de muchísimas comunidades pobres de regiones poco atendidas por los gobiernos federal y estaales.
El Banco de México informó que en marzo ingresaron cuatro mil 16 millones de dólares y también se da un dato técnico: los paisanos utilizan mucho las operaciones electrónicas.
Por esa vía llegaron tres mil 977.69 millones de dólares, en tanto que por giros u órdenes de pago apenas fue el 15.84 por ciento restante.
Para muchos analistas es un hecho inusual, pues se esperaba una caída hasta de un tercio por la crisis que afecta a Estados Unidos, donde la cifra de desempleados se acerca a los 30 millones.
Han sido más de 26 millones los que reclaman el seguro de desempleo, pero gran parte de los mexicanos radicados allá no tienen ese beneficio por no estar registrados en la seguridad social.
Además, se ocultan e inclusive una de las opiniones dominantes es rehuyen acudir a los servicios médicos en casos necesarios -como Covid 19 ahora- porque temen ser delatados y deportados.
En adición, el presidente Donald Trump ha dispuesto que no se otorguen muchos servicios a quienes carecen de documentos oficiales y aun para quienes tienen permisos temporales.
Los migrantes y sus familiares tienen un beneficio extra: el tipo de cambio les favorecen y reciben más pesos por la moneda estadunidense, aunque también el poder adquisitivo sale perjudicado con las alzas de precios.
