ACAPULCO, Gro.- Familiares de víctimas repudiaron la resistencia del Ejército y de la Fiscalía General de la República (FGR) para esclarecer la Guerra Sucia en 1960.
En un comunicado, denunciaron que el secretario de la Defensa Nacional Luis Crescencio Sandoval no permite el avance de las investigaciones “y protege a los militares criminales que aún viven”.
También exigieron la renuncia del fiscal General de la República Alejandro Gertz Manero, “por incompetente y omiso”, ya que acusaron que mantiene en impunidad todos los casos.
En ese sentido, reclamaron que solo dos agentes ministerios públicos de la federación “mal atiende a los más de 600 de nuestros casos en trámite en esa Fiscalía”.
Asmismo reprocharon la simulación y omisión de la Comisión para el Acceso a la Verdad, ante la falta de avances para esclarecer los hechos y dar con el paradero de los desaparecidos.
Así también que se conozcan todos los nombres de los militares responsables y se castigue a los que aún viven, ya que dijeron, no existe coordinación entre las instituciones.
“No queremos ni aceptaremos una falsa memoria construida por la mentira y la simulación, queremos justicia y una reparación integral del daño conforme a los terribles hechos”, expusieron.
Advirtieron que persiste una estrategia sistemática por parte del Estado, de solapar a militares que cometieron crímenes de lesa humanidad.
Puntualizaron que la Comisión Nacional de búsqueda no ha dado con el paradero de las víctimas, debido a que “de manera descarada solo simula” buscar a sus familiares desaparecidos.
Exigieron al subsecretario de Gobernación Alejandro Encinas Rodríguez cese el mal trato y discriminación hacia los familiares, reconocer a las víctimas para acceder a la reparación integral.
La instalación de una oficina de la Comisión para la Verdad en Atoyac que sea atendida por expertos en atención a víctimas de violaciones graves de derechos humanos.
Una reunión urgente con el presidente de la República Andrés Manuel López Obrador para la creación de una Fiscalía Espeial y la entrega de archivos secretos de la represión del Ejército.
Además, reparación integral del daño y que hagan su trabajo la Oficina Especial de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) y la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV).
El comunicado es firmado por unos 450 familiares de 80 personas desaparecidas forzadamente y de 86 víctimas directas de tortura y asesinatos cometidos durante la Guerra Sucia.
Son integrantes del Colectivo de Esposas e Hijos de Desaparecidos y Desplazados de la Guerra Sucia en Atoyac, Asociación Nacional Cívica Revolucionaria y la Asociación Representativa de Ejidos y Comunidades, y Víctimas de Violaciones de Derechos Humanos y Grupos Vulnerables.
