CIUDAD DE MÉXICO.- El presidente Andrés Manuel López Obrador descartó cualquier tipo de diálogo con la delincuencia organizada y defendió su estrategia de seguridad, la cual no cambiará, porque funciona.
“Nosotros hemos definido una política de cero corrupción y cero impunidad, y en el caso del combate a la delincuencia, tanto a la llamada organizada como a la de cuello blanco, no hay ningún acuerdo ni pacto.
“Está bien pintada la raya, la frontera; una cosa es la autoridad y otra cosa es la delincuencia. Cuando ya no hay frontera, como sucedía antes, es caos”, detalló el mandatario a pregunta expresa, en la Mañanera desde La Paz, Baja California Sur.
Y ejemplificó con “imagínense, en el tiempo de (Felipe) Calderón, que el secretario de Seguridad Pública, (Genaro) García Luna, tenía el compromiso de proteger a una organización de la delincuencia” y “cuando no existe esta separación, cuando no se sabe dónde termina la delincuencia y el Gobierno, pues no hay ninguna posibilidad de que las cosas mejoren”.
Ello, luego de que este jueves, el ex presidente del PAN Manuel Espino dio a conocer que dos grupos del crimen organizado respondieron a la propuesta de entablar un diálogo con el Gobierno federal, a fin de pacificar al país.
Esta propuesta la reveló durante el Foro Internacional Seguridad y Justicia por un México Mejor: “Yo le dije al secretario de Gobernación que la propuesta que puse en sus manos iba a buscar la manera de hacerla llegar a algunos de los grupos del crimen organizado en México y logré hacerla llegar; solamente recibí respuesta de dos”.
Detalló el ex funcionario que, en abril pasado, propuso este plan al presidente Andrés Manuel López Obrador, ante el incumplimiento de su promesa de campaña de pacificar al país.
“Le decía yo entonces al Presidente que no solamente no lo hemos logrado, sino que lo hemos empeorado. Hoy estamos peor que al principio en materia de seguridad y le ofrecí llevarle una propuesta y le dije que iba a hacer muy atrevida”, comentó.
Con información de 24 Horas
