CIUDAD DE MÉXICO.- El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que hay abierta una investigación sobre el “escándalo” derivado de una casa en la que vivió su hijo José Ramón López Beltrán en Estados Unidos.
En la conferencia matutina, el mandatario federal retó a presentar pruebas sobre este caso, sin embargo, afirmó que “no van a encontrar nada”.
“Si tienen pruebas que las presenten”, lanzó desde Palacio Nacional.
“Está abierta la investigación, a ver de quién es la casa, qué contratos recibieron de Pemex, quién los autorizó, no van a encontrar nada, absolutamente nada”, sostuvo.
AMLO dijo que su gobierno no protege a nadie, ni a sus hijos, pues tiene el mandato de acabar con la corrupción en el país.
“No protegemos a nadie, yo estoy aquí para cumplir con el mandato popular de desterrar la corrupción, y como ya lo mencioné, de todas esas lacras de la política que prevalecían, amiguismo, influyentismo, nepotismo, no permitir nada de eso”, expresó.
“Tratándose de quien se trate, aunque sean mis hijos, pero sí puedo decir que no somos iguales, nosotros tenemos principios, tenemos ideales”, abundó.
Por este caso, el presidente se refirió a Carlos Loret de Mola como un “periodista golpeador y corrupto”.
¿De qué acusan al hijo de AMLO?
De acuerdo con una investigación de Latinus y Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad, José Ramón López Beltrán vivió, entre 2019 y 2020, en una mansión de un directivo de una compañía petrolera que tiene contratos vigentes con Pemex.
Luego, según los medios, el hijo de AMLO se mudó en 2021 junto con su esposa Carolyn Adams a una residencia recién construida en Cypress, Texas.
Con información de Radio Fórmula
