1ª. PIEDRA-. En materia de publicidad oficial hay un principio de origen. Concesionarios de medios electrónicos dicen “vendo tiempo no criterio, y en medios impresos “vendo espacio, no criterio”, si las partes aceptan todo es entendible en ambos sentidos, claro, cuando hay amplio criterio.
Desde otro ángulo en esta relación contractual difícilmente alguien puede lanzar la primera piedra, además, es normal que en cada sexenio haya medios preferidos, unos más que otros, como parte de la condición humana. Ahora que invocando nuevamente al criterio, es responsabilidad directa del “jefe de prensa” aconsejar al jefe cómo “tratar” a esos medios.
Es normal que el gobierno seleccione a medios de mayor impacto, (cobertura o lectores), para distribuir sus recursos. Los estudiosos también focalizan segmentos socioeconómicos y culturales para opinarle al gobierno la distribución presupuestal buscando mejores resultados. Todos los gobiernos, -y éste no es excepción-, están sobrados de opinólogos.
PRECISIONES-. Según documentados artículos de la revista PROCESO de la semana pasada, la cuarta transformación, ciertamente bajó hasta en un quinientos por ciento el presupuesto publicitario federal, loable a todas luces, no obstante falta precisar entre “tiempos oficiales, tiempos de estado y TIEMPOS FISCALES”, exigiendo estos últimos una mayor explicación.
Los artículos tanto de Mathieu Tourlieri como de Neldy San Martín no tienen desperdicio, pero el propósito principal de esta entrega es exaltar las abismales diferencias presupuestales que se asignan a medios nacionales y DOS REGIONALES, pero también la inocultable fobia a “dos que tres” respetables medios nacionales de tendencia cultural, mal vistos públicamente por AMLO.
FOBIAS-. Por cuestiones de extensión, le abrevio extremos de trato publicitario presidencial a medios. Las empresas de Enrique Krauze, productor de los documentales CLIO, entre otros, facturaba en 208 9 millones de pesos al año y en 2019 NI UN CENTAVO. La revista NEXOS de Héctor Aguilar Camín facturaba once millones al año y ahora sólo 880 mil 151 pesos.
FILIAS-. Diarios que por primera vez aparecen en la publicidad federal son Tabasco Hoy, de la familia Cantón Zetina , (antes editores de la revista semanal Quehacer Político). También el diario Por Esto, a punto de cumplir treinta años. En 2018 no estaban en la partida gubernamental y en 2019 recibieron 42 millones el primero y 48 millones el segundo, ambos medios regionales.
Otra aparición en la nómina publicitaria gubernamental en 2019 es la empresa SAIO de Carmen Aristegui que facturó cuatro millones 204 mil pesos
De los medios nacionales, electrónicos e impresos, ni hablar, las rebanadas mayores son para televisa y azteca y de los impresos La Jornada brincó de 94.8 millones en 2018 a 200.7 millones en 2019. Mañana segunda parte.
